Por Asfaltos.
La cinta, sin quererlo -o quizá sí, quién sabe-, dio mucho de qué hablar al anunciar que su principal actor sería sustituido en unas regrabaciones de último momento. Así es, el personaje principal de «Todo el dinero del mundo» recaía en el ahora caído Kevin Spacey, por lo que el director de la película, Riddley Scott, optaba por borrar todo rastro de éste para dejar al mando a Christopher Plummer. Sí, Plummer lo hace bien, de hecho muy bien, pero no deja de quedársenos esa duda de cómo lo hubiera hecho el otro que -pesar de sus acusaciones- no es mal actor.
«Todo el dinero del mundo» es la más reciente película del británico Riddley Scott, quien con esta película da seguimiento a muchos de los temas que tanto le ha interesado retratar. En este caso, y de manera evidente por el nombre de la producción, Scott aborda algunos de los vicios que el dinero puede provocar en hombres y mujeres. El ratrato, destaco en el título de este texto, resulta perverso… una perversidad natural, la propia del dinero, del poder.
Basada en hechos reales, «Todo el dinero del mundo» nos presenta la historia alrededor del secuestro de John Paul Getty III, nada mas y nada menos que el nieto de Jean Paul Getty, el hombre en ese momento más rico -y por lo tanto poderoso- del mundo. La historia principal es el secuestro, sí, pero varias otras se nos van contar en una producción que para no variar, cuenta con elementos de primer mundo para sernos contada.
Plummer no es ningún improvisado; en 2008, por ejemplo, se hizo acreedor al Oscar como «Mejor actor de reparto» por su papel en «Beginners, así se siente el amor» (2010). Como Getty resulta extraordinario: un hombre misterioso, difícil de leer, y desde luego, firme en sus posiciones. La verdad es que la actuación de Plummer es uno de los grandes agasajos de la película que dirige sin muchos problemas un Ridley Scott que se nos refresca con la vuelta al mando de una película por así decirlo, un poco más seria.
Después de haber estado en cintas más de corte de acción y aventura, con «Todo el dinero del mundo» Riddley Scott disecciona a los secuestradores, al millonario que ni por «Todo el dinero del mundo» negociaría con criminales, a la familia inmediata, a la policía local italiana y hasta a la mismísima prensa (para mí, unos de los grandes antagonistas de esta película). Riddley Scott consigue además una película que resulta entretenida, de principio a fin.
Junto a Plummer vemos por ejemplo, en un papel que me dio mucho gusto verle interpretar, nada mas y nada menos que a Mark Wahlberg. El actor, quien también en últimas fechas había sido encasillado como héroe de acción o como personaje cómico, nos regala sin exgaraciones a un negociador bastante creíble que trabaja para Plummer y que además servirá como vehículo de emociones entre los personajes y los espectadores.
Otra actuación a destacar es sin duda la de Michelle Williams, quien interpreta a Gail, madre de John Paul Getty III. El personaje de Gail, además del de Getty el más interesante y sólido de la cinta, nos permite también entender el drama al que los vicios ligados al dinero llevan durante todos los minutos de su duración.
¿Recomendable? Absolutamente, pues la cinta dará mucho de qué hablar, y sobre todo mucha polémica que aportar. «Todo el dinero del mundo» estrena mañana viernes 16. Consulten cartelera.
Leave a comment
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.