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Por Viry Masfalda (de Masfaldas).
Hola banda, ¿qué tal sus fiestas navideñas?
Cada persona tiene diferentes maneras de celebrarlo. En lo personal es un momento para estar y compartir con la familia, para involucrarme en los asuntos de la cocina que me encantan, para agradecer las cosas que tengo, para mantener viva la esperanza de todas las cosas que anhelo, para reflexionar sobre las cosas que he vivido y para tratar… ¡de no comer tanto!
En esta Navidad tuve la oportunidad de participar en otra parte de la música, más espiritual que es parte de un ritual de celebración propia de esta festividad: la música de alabanza.
Hace muchos años, incluso antes de tener batería, toqué el «bombo peruano» en un grupo de alabanza. También tocaba un pandero y a veces las claves; fue mi primer experimentación de la percusión antes de estudiarla en forma.
No era un grupo convencional, siempre nos gustó apostarle a lo nuevo y proponer un estilo de alabanza diferente a lo que estábamos acostumbrados a escuchar. Así que llegué a mi pueblo y mientras acompañaba a mi papá me encontré con una de mis compañeras de grupo que me invitó; en menos de dos minutos decidí integrarme para tocar en la celebración. Esa misma tarde hicimos el montaje de canciones, las armonías de 3 voces (que además cabe mencionar) son bellísimas. Estuvimos acompañadas por un chelo y un violín, experimentamos en ritmos como bossa nova y reggae; finalmente el resultado fue precioso, me quedé con una satisfacción muy linda de participar nuevamente en esa parte de la música que para mí tiene un significado muy profundo.
Después la cena, los regalos, los abrazos y esas cosas que se respiran en el ambiente que hacen que esta fecha sea tan especial.
Sigo en casa de mi familia, desde acá les escribo y deseo que disfruten estos días acompañados de toda la gente que quieran. Les mando un abrazo grande y mis mejores deseos.