Por Sandyluz.
A veces la música del filme pasa inadvertida; a veces el soundtrack no sólo ilustra la cinta, sino que permanece sonando como profética reverberación… Estoy hablando del filme «Rudderless», de su tema principal «Sing along» y de su estrella juvenil, Anton Yelchin, quien murió prematuramente el pasado 19 de junio del 2016, para sorpresa de quienes alguna vez lo vimos actuar…
Este joven actor (27 años) apareció en «Star Trek: en la oscuridad», intepretando a Pavel Chekov. La versión oficial indica que, en su garaje, dejó su vehículo en marcha y éste retrocedió, dejándolo atrapado entre un pilar y una valla de seguridad. Así, con el final de una prometedora carrera actoral, la nostalgia nos transporta al 2014, a «Rudderless», filme donde, irónicamente, se aborda el sensible tema de morir absurda y prematuramente, con tantos sueños por delante.
En «Rudderless», cinta dirigida por el reconocido actor William H. Macy, Yelchin interpreta el rol principial: Quentin, un chico desgarbado y con baja autoestima, pero con un montón de aspiraciones musicales dentro del bolsillo de sus jeans. Quentin se encuentra casualmente con Sam (Billy Crudup) en un bar, mientras éste interpreta una canción autoría de su recién difunto hijo. El afligido padre lidia con su duelo, mediante interpretar las canciones compuestas por su hijo. Quentin apunta su fe hacia esas canciones y se aferra a que Sam integre una banda con él y sus amigos, para poner ésas y otras más dentro de un repertorio. La intersección de Sam con este muchacho se torna benéfica en ambos sentidos: a Sam le ayuda a asimilar su pérdida; a Quentin a confiar en sí mismo y a direccionar su vida.
La virtud del filme no radica en que participe en un rol secundario la famosa cantante de pop Selena Gómez, sino en que las canciones que se compusieron para el filme por Eef Barzelay, trascienden su contexto y forman un soundtrack de calidad, que merece la pena por sí solo. La película, clasificada como un drama musical, esconde una desconcertante vuelta de tuerca en el clímax, ofreciendo una historia bien narrada; las canciones, con un toque de balada rock y balada country, realmente se hacen escuchar, además de que tocan un par de fibras sensibles del espectador.
Los críticos opinan que, sin mayores expectativas, éste es uno de esos filmes que, con modesto presupuesto, exigió unas de las mejores actuaciones de Crudup, Yelchin y Selena Gómez.
Una atmósfera de añoranza y sutil cotidianidad marca a «Rudderless» como historia inolvidable, más aún, si se animan como yo, a escuchar el disco completo, el cual interesa y tiene sentido, incluso sin conocimiento previo del filme. Además, cuando lo vean –ojalá que sí– tendrán presente que la joven estrella se apagó antes de tiempo, tal y como sucede dentro del universo de la cinta. «Rudderless»: una historia «de por vida» con color naranja atardecer, un filme para sentir el nudo en la garganta, para reflexionar y también para cantar un rato.
Para consultar el tema principal de la película «Ruderless», «Sing along», puedes seguir este enlace.
Sandyluz. «Detrás de la pluma…» Egresada del Tecnológico de Monterrey Campus Toluca, de la carrera de Ciencias de la Comunicación. Completó estudios de Creación Literaria en la Escuela de Escritores del Estado de México (SOGEM). También terminó una maestría en Estudios Humanísticos con especialidad en Literatura, en el Tecnológico de Monterrey. En un plano más relajado, es aficionada a los libros y a la escritura desde corta edad; ha escrito de manera informal cuentos y poesías; con uno de sus primeros cuentos ganó un concurso local del cual obtuvo su primer retribución económica y profesional, siendo ello un significativo incentivo para seguir escribiendo. La Literatura ha sido una válvula de escape para no enfermar de realidad. La fantasía reanima el fulgor de los sueños que soñamos dormidos y que soñamos despiertos…
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