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Por Asfaltos.
Su nombre es Pablo, su apellido León. Mexiquense de origen, pero defeño por residencia, Pablo León utiliza voz, sintetizadores, samplers y batería eléctrica para sacar a flote su creatividad. Sus influencias, como queda claro al escucharle, son diversas. Sus experiencias derivadas de fiestas alocadas, mujeres y lo cotidiano son plasmadas en su música.
Definir el sonido de Pablo León es un tanto ocioso. Su música, lanzada a través de su proyecto Los Pinches Fresitas, da cuenta de las experiencias de un cuate -que como todos nosotros- vive sus experiencias salpicadas con un poco de humor y tristeza. Con un sonido entre pop y rock, Los Pinches Fresitas les aseguro que no les dejará indiferentes.
De reciente creación, pues a partir de 2013 empezó a subir temas a través de su sitio en SoundCloud, Pablo se hizo muy popular con su muy divertida Tengo un amigo que me ama. Pronto el proyecto de Pablo haría ruido en la blogósfera; sitios de gran relevancia le hicieron ruido. Actualmente Pablo sigue componiendo y promoviendo sus presentaciones, que por cierto, resultan absolutamente entretenidas.
Creador de temas como Empecé a stalkearte y no puedo parar, Bebimos, bailamos, cogimos, besamos y Todo mal, les presento Veñ, veñ, ¡veñ!, título de su más reciente sencillo. En medio de las tradicionales fiestas -o bacanales- de fin de año, con el frío animando los arrimones y los empiernamientos, Pablo acierta en su himno «a la alegría». Perfecta para una noche divertida (sexo y alcohol incluidos definitivamente), Veñ, veñ, ¡veñ! es la canción elegida para darle rienda suelta al esperadísimo maratón Guadalupe-Reyes.
Ya saben, si les ha gustado la propuesta no dejen de apoyar siguiendo a Los Pinches Fresitas vía SoundCloud, facebook y twitter. ¡Buen Lunes musical, banda!
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