¿Recuerdas a Luz Elena?

Por Mariana Uty Estrada.

Mejor conocida como Lucha Villa, esta actriz y cantante mexicana se caracteriza por su grave e inconfundible voz, y su fuerte y distinguida participación en la pantalla grande.

¿Recuerdas a Luz Elena?

Nacida Luz Elena Ruiz Bejarano, inició su carrera en los años 60’s, primero en el ámbito musical, en el que alcanzó fama por su prominente cantar, para después colaborar en el cine interpretando a mujeres en distintas facetas, en su mayoría en historias de origen campirano, muy representativas de la época. Lucha Villa mostró que podía ser independiente y de mucho carácter, y a su vez, la madre abnegada.

Continuó hasta la década de los 90’s, siendo el día de hoy una de las más destacadas cantantes en su género, y una de las actrices más importantes del cine mexicano, quien desde sus inicios obtuvo reconocimientos a nivel internacional.

Su carrera musical parecería que fue mucho más destacada que la del cine. Y aunque ciertamente Lucha es conocida por éxitos como La media vuelta, La mano de Dios, entre muchos otros, existen algunos papeles que son imposibles de olvidar por su inigualable talento, y claro está, su gran  – y hasta cierto punto poderosa – presencia.

Sus roles en películas como El gallo de oro, El Lugar sin Límites, Mecánica Nacional, Encuentro inesperado y Lolo marcaron su carrera, dándole la oportunidad de demostrar que no había personaje que ella no pudiera realizar. Las tres primeras, encontrándose entre las 100 mejores de nuestro cine, lograron posicionarla como una de las mejores actrices mexicanas, pues aunque hubo otras que obtuvieron más fama, Lucha es considerada una de las más versátiles al elegir interpretar papeles muy distintos entre sí.

En El gallo de oro, adaptación de la obra homónima de Juan Rulfo, Lucha Villa interpreta a Bernarda Coutiño, “La Caponera”, una mujer fuerte e independiente que su mayor interés es la música, ya que ella es una cantante que va de gira por los palenques y ferias de distintos poblados. Sin embargo, Mecánica Nacional nos muestra una cara totalmente distinta al presentarnos a una madre y esposa abnegada. En El lugar sin límites, adaptación del texto de José Donoso, tiene el papel de una prostituta, que aunque no víctima de sus circunstancias, se siente desesperanzada al ver que el lugar donde vive no hay progreso alguno.

Entre los premios recibidos, sobresalen dos Diosas de Plata, dos Arieles y un especial reconocimiento de la Asociación de Cronistas de Espectáculos (ACE) de Nueva York.

Es, indudablemente, una mujer ejemplar, y por esta misma razón, es considerada una de las grandes del cine. Ella es la única en haber recibido distintivos en los dos ámbitos; solo La Grandota de Camargo acompaña una brillante carrera en el cine de una musical exitosa cuando se habla del género ranchero.