Las muchas vidas de R2-D2

Por Asfaltos.

El sábado pasado murió a los 81 años de edad el actor británico Kenny Baker, mejor conocido por interpretar al androide R2-D2 en la saga Star Wars. Baker, a lo largo de las primeras seis películas fue el encargado de meterse literalmente en uno de los personajes más entrañables de la franquicia; solo en «Star Wars: Episodio VII – El despertar de la Fuerza» ya no «interpretó» al androide, aunque sí fue acreditado en la cinta como consultor de éste.

Kenny Baker tomando un descanso de su interpretación como R2-D2.

De 1 metro y 12 centímetros de estatura, Kenny Baker era sin duda de los actores de talla pequeña más conocidos en el cine gracias a su papel como R2-D2, mismo papel que le hizo viajar por varios países como sucedió con su visita a Ciudad de México hace 15 años; de aquella experiencia, acompañado de Warwick Davis (Wicket) y Jeremy Bulloch (Boba Fett), guardo por cierto una reliquia periodística personal que les invito a leer en este link.

La trascendencia de Kenny Baker como actor ligado a R2-D2 es innegable, sin embargo, la vida de su propio personaje le ha rebasado también, pues el propio androide involucra a otros nombres que vale la pena recordar del mismo modo. Y es que justamente el 4 de marzo de este mismo año (2016), el profesor y experto de efectos especiales Tony Dyson moriría en su casa en la isla de Gozo, en Malta, dejando atrás un enorme legado. Dyson fue el responsable de armar al famoso androide R2-D2, para el cual construyó ocho modelos del personaje, de los cuales se incluyen las unidades en las que se metería el mismo Kenny Baker.

Tony Dyson, quien finalmente ensambló a R2-D2, también nos dejó este año.

Ahora bien, si nos remontamos a los inicios del propio R2-D2, habría que empezar obviamente en la mente del responsable de Star Wars, George Lucas, quien crea al personaje como el alivio cómico de su saga. Inspirado en «La fortaleza escondida» de Akira Kurosawa, Lucas pensó en R2-D2 y C-3PO como en Tahei y Matashichi, quienes acompañaban al héroe de la película, el General Makabe.

Inspirado en los androides de la película «Naves misteriosas» (1972) de Douglas Trumbull, el personaje que George Lucas ha confesado es su favorito, pasó a ser diseñado por el que fuera responsable también del aspecto visual de las películas: el gran Ralph McQuarrie. Junto a McQuarrie, cuyos primeros bocetos de R2-D2 han regalado más recientemente a otros dos androides igualmente famosos (C1-10P, mejor conocido como «Chopper» de «Star Wars Rebels», y BB-8 de «El despertar de la Fuerza»), el experto en efectos especiales John Stears contribuyó también en el aspecto del droide.

Ben Burrt recibiendo un premio especial de la Academia.

En lo que se refiere al sonido de R2, el responsable es el diseñador sonoro Ben Burtt, quien creó los sonidos y efectos «vocales» de éste y muchos otros personajes, artefactos y naves de la saga. Por si fuera poco para el «Episodio 8» de Star Wars habrá un nuevo nombre asociado a R2-D2; será el también británico Jimmy Vee quien tomará el rol que Kenny Baker dejó vacante tras su fallecimiento, lo que anticipa de entrada -si me permiten la especulación- que veremos más acción de uno de nuestros androides favoritos.

Hasta aquí los nombres más reconocidos asociados a R2-D2, sin embargo no deben dejarse a un lado también a quienes operaron a control remoto las unidades R2 que estaban construidas de ese modo, a los asistentes del propio Kenny Baker, a los responsables de la versión digital del personaje en las precuelas, así como a quienes lo han dibujado de forma tradicional o en computadora para las series animadas, cómics y videojuegos, y es más, también a quienes le han dado vida a través de novelas, por mencionar algunas de las muchas variaciones del personaje.

En fin, si bien Kenny Baker nos dejó en una muerte que obviamente lamentamos todos los fans de la saga, R2-D2 como personaje y creación aún vive y seguirá viviendo; primero a través de quienes aún con vida tuvieron que ver con su creación y desarrollo, y segundo por la vida extendida que seguramente nos trascenderá también a todos los fans de la saga, tanto los que ya somos seguidores como de los que vienen. La misma reflexión se ajusta, además, para todos y cada uno de los personajes de la saga; y para mencionar un ejemplo, basta con pensar en lo próximo a suceder con Han Solo, quien pronto dejará de asociarse únicamente a su intérprete original Harrison Ford, para darle paso ahora a un nuevo actor que nos ampliará la historia del famoso contrabandista, y cuyo nombre ya conocemos (Alden Ehrenreich).

RUGIDO DE LA SEMANA: Al parecer (pues no la he visto aún) «Cazafantasmas» (2016) no es tan mala como la pintaban y como ya comprobamos también, «Escuadrón suicida» (2016) tampoco es tan buena como nos la vendían. La lección que debe quedar para críticos, prensa especializada, seguidores y curiosos, es sencilla: «ver para creer»; y para la industria cinematográfica, como ley, en teoría debería aprenderse el hecho de no andar quemando cartuchos que afecten la experiencia final de la película. Sí, les estoy hablando de nuevo a ustedes, DC Entertainment…

Asfaltos. Sobrevivo en una ciudad junto a millones de personas. ¿Mexiqueño? Me enamoro rápido y olvido difícilmente. Amo la música, el cine, los cómics, las mujeres y -últimamente gracias a los servicios de streaming– las series también. Vivo la vida a través de letras y melodías. Músico frustrado. Me pueden encontrar escuchando U2, Radiohead y Coldplay; así como Grand Funk Railroad, Styx y Eric Burdon; Chetes, Jumbo y Siddhartha; y hasta Jesse & Joy, Silverio y Aleks Syntek. Batman y Star Wars mis pasiones; también el Cruz Azul, pero ya saben… subcampeonísimo. Sobreviviente y náufrago; ermitaño que odia la soledad.