Bellas rayitas

Por Laura Ramírez.
Ilustración Niña Papalote.

El español es una lengua tan perfecta que encontró su propia manera de identificar cómo pronunciamos: con los acentos.

Bellas rayitas.

Vamos a regresar a segundo de primaria, tantito nada más. No es nostalgia, es recuerdo de tus clases de español. ¿Te acuerdas de la acentuación? Es la intensidad mayor con la que pronuncias una sílaba en una palabra, la fuerza de la voz, por así decirlo.

Si dices “corazón”, pues suena más fuerte “zon”.

No sé si te acuerdes, pero hay dos tipos de acentos: el prosódico y el ortográfico. O mejor dicho, el que lleva rayita y el que no.

El prosódico, no necesita escribirse, sólo con la entonación se conforma. El ortográfico es la rayita que deberías ponerle a las palabras que deben llevarla. Esa rayita se llama TILDE.

¿Cómo debes usarla? Oh la terrible cuestión.

Sigue viajando en el tiempo y llega a ese momento en el que tu maestra decía “palabras graves, agudas y esdrújulas”. Quédate ahí.

Todos tus problemas para acentuar se terminarán si entiendes bien las reglas de las palabras agudas, graves y esdrújulas. Es cuestión de darle una pensada. Vamos a recordarlas.

Palabras agudas

Son las que tienen el acento en la última sílaba. Si volvemos a lo que leíste justo arriba, nos referimos a cuando suena más fuerte. Aquí algunos ejemplos:

1. Canción
2. Además
3. Tabú

¿Cuándo vas a ponerles rayita? Cuando terminen en “n”, “s” o vocal. Si no terminan así, entonces, no se las pongas.

Palabras graves

Éstas son las que llevan la mayor fuerza de la voz en la penúltima sílaba. ¿Algunas palabras así?

1. Acento
2. Puerta
3. Ventana
4. Cerveza

¿Cuándo les vas a poner rayita? Sólo cuando NO terminen en “n”, “s” o vocal.

Por ejemplo:

1. Débil
2. Cáncer

Palabras esdrújulas

Son las más divertidas, llevan la fuerza en la antepenúltima sílaba y siempre, SIEMPRE, van a llevar rayita.

Por ejemplo:

1. Teléfono
2. Lágrima
3. Vesícula

Si siempre tienes presente esas reglas, será más fácil que puedas acentuar bien las palabras y escribir bonito.

Es cierto, hay algunas excepciones que ya iremos viendo, por lo pronto nos conformamos con que, en adelante, le pongas rayita a las palabras que lo merecen.

Ah, una última cosa. Siempre, sin importar si escribes en mayúscula o minúscula, se ponen rayitas.