‘Martita la piadosa’, de Chava Flores

Por Asfaltos.

Tengo el infortunio -no lo veo de otra manera- de tener que viajar varias veces a la semana a Santa Fe, en Ciudad de México. Primero lo hice en auto, pero cuando me harté de estar detrás del volante, empecé a hacerlo en camión. ¿Se han tenido que enfrentar a viajar en camión hacia Santa Fe? Luego vino la supervía, la autopista urbana que conectaba al sur de la ciudad con Santa Fe. Fue una «maravilla», sí, ¿pero a qué costo?

La tarifa de usar la supervía en su trayecto de Luis Cabrera a Circuito de Los Poetas es de 46 pesos, ¡46 pesos! Es la tarifa más alta para los poco más de 2 km en todo el territorio nacional, y sí, lo pagan quienes en efecto ven una reducción considerable de tiempos, sobre todo cuando no es hora pico, porque si no… Ahora ya es posible acceder a la supervía en camión también, lo que creo que fue una decisión tardía pero eficaz para una autopista que estaba viéndose desperdiciada, sobre todo después de todo el daño que provocó al momento de su construcción.

¿Por qué el gobierno no promovió invertir en un sistema de transporte eficiente en lugar de volver a privilegiar a los automovilistas? ¿Por qué no pensar en un Metro que conectara con Santa Fe desde un principio? ¿No hubiera sido una cosa increíble? Al cruzar por la supervía una respuesta me quedó clara, el costo para la construcción del «progreso» fue alto. Casas que ocupaban el sitio donde cruza la supervía quedaron mutiladas o simplemente desaparecieron. La imagen con la que ilustro mi texto da cuenta de la imposición a la que se llegó con una obra que afectó a «unos cuantos» para ayudar «a otros pocos».

En su canción «Martita la piadosa», el cronista urbano por excelencia, Chava Flores, dedicó melodía y letra a quienes sufrieron la corrupción en carne propia, a costa del llamado «progreso». No soy ciego a que una ciudad debe de evolucionar, ¿pero no habría sido mejor tener un plan urbano sólido en el que no se tuviera que afectar a otros porque no se pensó en los costos de las malas decisiones? Una pregunta sencilla: ¿por qué diantres construir Santa Fe donde está? Las complicaciones siguen siendo muchas, y si vemos hacia el norte los problemas siguen siendo altos, y las «soluciones» no se esperan más suaves.

En «Martita la piadosa» Chava Flores da cuenta del sufrimiento que él también tuvo que padecer, cuando bajo la regencia de Ernesto P. Uruchurtu, vio afectado un negocio propio por la decisión gubernamental de cerrar restaurantes y cabarets después de la 1 de la madrugada. Bajo ese mismo gobierno las obras viales aumentaron de forma importante, y muchas familias como las relatadas en la canción, vieron afectado su patrimonio. Sí, justo como hace unos años, cuando amanecíamos para 2011 y el gobierno de Marcelo Ebrard ocupó con granadores las calles de la colonia La Malinche para la construcción de la supervía. Tantos años desde aquella Martita de don Chava, y las cosas siguen y seguirán iguales, «ta madre»…

Foto de Notilibertas.