• Page Views 1967

«Hedi», la revolución personal

Por Ana Escárcega.

Una semana antes de su boda, el joven Hedi conoce a una mujer de espíritu libre que lo hace sentirse vivo por primera vez en el hábil y absorbente drama «Hedi» de Mohamed Ben Attia. Diferentes audiencias tendrán diferentes visiones: quienes no conozcan los acontecimientos actuales de Túnez apreciarán una película sobre la íntima relación con los personajes, mientras que otros notarán no sólo la situación económica de la nación, sino también el antes y el después de la revolución en términos de la gente. «Hedi» tiene la madurez (junto con la colocación de la Berlinale y los hermanos Dardenne asociados como coproductores) para trabajar con éxito el nicho de arte en el ámbito internacional.

Hedi (Majd Mastoura) es la misma imagen de un hombre que camina perezosamente por el sendero que se le ha trazado. Se dedica a vender coches a empresas, pero el país atraviesa una recesión económica; tampoco ayuda el hecho de que es un pésimo vendedor con cero interés en lo que está haciendo. Eso se extiende no sólo a su trabajo, sino también a su vida personal: en una semana se casará con Khedija (Omnia Ben Ghali), pero para él no hay chispa, todo ha sido arreglado por su madre, Baya (Sabah Bouzouita), al igual que todo en su vida.

Su madre es una viuda fuerte decidida a mantener a Hedi cerca, especialmente desde que su hijo mayor (y favorito), Ahmed (Hakim Boumessaoudi), vive en Francia; Baya prepara el piso de arriba para albergar a los recién casados, y probablemente nunca ha pensado en preguntar a su hijo lo que él quería.

En una visita de ventas a la ciudad costera de Mahdia, Hedi conoce a Rim (Rym Ben Messaoud), una bailarina itinerante y coordinadora de actividades para turistas en hoteles. Aunque conoce a Khedija desde hace tres años, nunca ha estado a solas con ella, salvo por una cita inocente en su coche; la libre vida de Rim es una experiencia completamente nueva y rápidamente comienzan un romance intenso.

En un primer nivel, «Hedi» es una historia universal acerca de un joven que necesita elegir entre el deber y la pasión. Sin embargo, el distanciamiento de su cultura disminuiría mucho lo que hace que la película sea tan rica. Aunque la película está ambientada en la actualidad, cinco años después de la revolución, Hedi es mucho más una figura de antes: su vida es un ciclo rotundo de trabajo sin inspiración y obediencia a su madre autoritaria (que puede ser vista como un sustituto del estado).

Khedija parece ser una joven encantadora (su personaje es el menos desarrollado), pero no tiene ambición. Procedente de una familia tradicional, en la ciudad conservadora de Kairouan, fue criada sin aspiraciones más allá de un marido y de niños. No tiene nada de qué hablar con Hedi, quien a su vez sí tiene ambiciones y sueños que jamás se había atrevido a expresar. Rim, con sus tatuajes visibles y su cabello alborotado, es lo contrario: es cinco años mayor que Hedi, viaja mucho, es independiente y alegre, ella representa su revolución personal, una autovaloración de su propia existencia; en un momento de la cinta Ben Attia incluye una escena de baile maravillosa en la que Hedi se pierde completamente en la música en un instante de liberación total.

Después de que muchas escenas de él parecieran cerradas, es tremendamente satisfactorio ver al personaje convertirse en una figura dinámica. Su nombre en sí es significativo, ya que Hedi significa calma, y Mastoura lo representa con una pasividad sombría hasta que Rim abre sus ojos a la posibilidad de disfrutar de la vida en sus propios términos.

 

Los grandes acercamientos aumentan el sentido de intimidad y la cercanía de los personajes, mientras que la pantalla panorámica permite a Ben Attia comentar sutilmente sobre los problemas económicos de Túnez, con hoteles y playas vacíos, y las empresas que luchan en esta era de terrorismo para sobrevivir sin turistas. Se trata de un filme valioso y cargado de posibles lecturas que podrás disfrutar a partir de mañana viernes 17 de febrero en cines nacionales (consulta cartelera).

Con información e imágenes cortesía de IQ Icunacury Acosta & Co.

 

 

Share This Article

Reconoce MX

Reconoce MX es un proyecto de difusión artística, cultural y de conciencia social que está enfocado a difundir y fomentar el entretenimiento alternativo de calidad para todo el público que comparta el mismo entusiasmo.

«Lion: Un camino a casa», la necesidad de saber

Next Story »

Le Cinéma IFAL: Cartelera del 16 al 23 de febrero

Leave a comment