Por Asfaltos.
En ocasiones, en diversos aspectos de la vida, se dice que menos es más; es decir, en tiempos donde todos queremos saturar de todo lo que hacemos, entre más simple y sencillo, mejor. Al parecer ese fue el pensamiento que se le cruzó al director Doug Liman, reconocido por sus trabajos «Identidad desconocida» (2002), «Sr. y Sra. Smith» (2005), «Jumper» (2008) y «Al filo del mañana» (2014), por mencionar algunos. Con su más reciente «En la mira del francotirador», el director se fue hacia algo más simple, casi minimalista.
La premisa es sencilla. Dos soldados, interpretados por Aaron Taylor-Johnson y John Cena, se encuentran a finales de la guerra de Irak en terreno enemigo. Escondidos, protegidos bajo un camuflaje, se encuentran monitoreando una zona de guerra donde aparentemente hay solo cadáveres. Harto, uno de ellos, sale a explorar con la «tranquilidad» de que no hay mayor peligro en la zona, hasta que es herido.
El thriller psicológico de Doug Liman comienza entonces, cuando el otro soldado acude a ayudar a su amigo, pero también es herido y acorralado detrás de un muro que antes era parte de una escuela local. Los dos soldados, lastimados, son acorralados entonces por un francotirador que les mantiene en la mira, y que sobre todo con uno de ellos, a través de una radio, comienza a platicar para juguetear con él mientras prepara lentamente su muerte.
Escrito por Dwain Worrell, el guión de «En la mira del francotirador» fue uno de los trabajos más codiciados, y formó parte inclusive de la Lista Negra (Black List) de Hollywood como uno de sus mejores guiones no producidos. La cinta, es por cierto, una de las producciones originales de Amazon Studios, quienes apenas sorprendieron con la aclamada «Manchester By The Sea», entre otras producciones.
Sin embargo, si bien la idea podría parecer buena -aunque la temática ha sido ya explorada y la forma en la que se ejecuta ha sido también abordada-, «En la mira del francotirador» pareciera que por las altas pretenciones que se plantea, termina por no funcionar de la manera en la que se espera. La cinta termina por ser un poco tediosa por el simple hecho de lograr a fuerza conseguirse como se pensaba, sin tener grandes elementos que la sostengan.
El peso recae sobre todo en el personaje de Aaron Taylor-Johnson, quien no logra cargar con una película entera donde la cámara prácticamente descansa todo el tiempo sobre él. En contra también, pensado para darle un respiro a su actuación, la construcción del personaje del francotirador que escuchamos a través de la radio resulta poco sólida y por momentos un tanto risible. Sin meternos en detalles de cómo hubiera o no hubiera construido su cinta Doug Liman, a mi parecer en silencio las cosas hubieran sido un poco más aterradoras.
Elementos como el viento, el polvo propio del desierto y la incertidumbre por la localización del francotirador que acecha a los dos soldados norteamericanos, sí sirven un poco para adentrarnos en la cinta. Es a pesar de todo hacia el final de «En la mira del francotirador», que la cinta termina por evidenciar sus errores para provocarnos poco o nada frente a la pantalla.
«En la mira del francotirador» llega a cines de Ciudad de México, Morelia, Cuernavaca, Guadalajara y Estado de México, hoy jueves 20 de julio, a través Cinépolis Distribución.
Con imágenes cortesía de Cinépolis Distribución.
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