Por Elizabeth González Pazarán.
Después de haber esperado 4 años para que los Stereophonics volvieran a pisar tierra azteca, el día por fin llegó, y el 2 de diciembre pasado estaba marcado para volver a escuchar los acordes de sus guitarras y sentir su energía única en el escenario, que sin duda supera todas las expectativas, ya que escucharlos en vivo es toda una experiencia.
Ansiosos los fans iban llenando El Plaza Condesa, y al punto de las 21:00 horas comenzaban a impacientarse; unos especulaban cual sería el setlist, otros aprovechaban para ir por bebidas o platicar para así hacer la espera más amena, hasta que el momento llegó, las luces se apagaron y los primeros acordes de «Caught by the wind» comenzaron a sonar.
Con una vibra que contagiaban a sus fans el concierto siguió, canciones nuevas y viejitas se hicieron presentes, con riffs de guitarra que erizaban la piel, acordes electroacústicos y canciones en piano, la noche siguió su curso.
Entre canción y canción, Kelly Jones, la voz principal de la banda, agradecía en inglés y en español que corearan y se entregaran en cada canción, recordando que sólo habían estado en México un par de veces, pero prometieron volver y esta vez no tardarse tanto, ya que nuestro país y nuestra gente les encantan.
De los temas más coreados fueron «Have a nice day», «Maybe tomorrow», «Sunny», «All in one night», casi al final del concierto se despedían con «The bartender and thief», pero sólo fue una pausa para regresar al escenario y tocar algunos temas más y finalmente cerrar su presentación con un clásico: «Dakota».
Sin duda fue un concierto que ni los fans de la agrupación ni cualquiera que se llame amante de la música, se debió haber perdido. Y como con todas las bandas que nos ponen a cantar, a bailar y que nos llegan al corazón, nos quedamos con ganas de más y esperamos que pronto los Stereophonics vuelvan para regalarnos una noche como la del sábado.
Fotos: Óscar Villanueva (OVD) / Cortesía.
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