#Ambulante2018: «El reino de la sirena»

Por Asfaltos.

El mar y sus innumerables secretos. El misterio del mar es sin duda uno de los que más interrogantes han provocado en la humanidad a lo largo de su muy amplia historia. La inmensidad, de éste sigue siendo la clave de su maravilla que a la vez aterra. Es la adversidad, las ganas de salir adelante la que hacen que muchos hombres se enfrenten al mar, aún sabiendo que en ocasiones podrán salir no tan bien librados de este inminente encuentro.

Bajo el nombre de «El reino de la sirena», el realizador Luis Rincón nos regala una poética visión de un pueblo en Nicaragua donde frente al dolor los habitantes hablan del poder de una sirena que les quita lo más preciado que tienen. Algunos hombres no han perdido la vida; pero muchos, en su mayoría, dejan secuelas de ese poder hipnótico que se la atribuye a la legendaria figura mítica que se dice controla el mar en aquella región.

Egresado de Comunicación en la Universidad Iberoamericana, Luis Rincón se nos presenta como un muy interesante realizador que con calma y con cuidado, nos va construyendo la narración de aquel sitio en Nicaragua donde el dolor y las adversidades son cuestión de toda la vida. Sí, hay esperanzas y grupos sólidos en la región, pero también hay fantasmas presentes que deambulan con sus lamentos.

Me pareció muy adecuado el ritmo y la forma en la que Rincón nos lleva de la mano para conocer a los distintos hombres a los que se les da voz en la pantalla; desde quienes han perdido la motricidad en las extremidades inferioes, pasando por quienes luchan contra sí mismos, hasta quienes también se enfrentan a la violencia presente en diversas formas en la región.

Algo que me pareció muy interesante, a nivel de contenido, fue la presencia de una de las lenguas de Nicaragua, misma que se escucha de manera constante en la película, llegando inclusive a desplazar al español que lo tenemos más como el idioma oficial de ese país.

Además, con mucha delicadeza, apoyado en una fotografía que se destaca y se disfruta en la pantalla grande, «El reino de la sirena» termina siendo una poesía visual que nos hace reflexionar -entre otras cosas- en la fragilidad humana: en lo fugaz de la vida.

Si bien la que podría considerarse la pregunta principal del documental, esa que le da nombre y que parece quedar muy clara en las palabras de sus habitantes, queda contestada; no es en realidad ésta el fin del trabajo de Luis Rincón, sino mas bien la excusa para adentrarnos en su historia. Porque si bien se nos presentan hechos en este sitio en particular en el que nos adentramos, también hay una narrativa, una metáfora, una serie de alegorías y sin duda alguna una intención artística por contar, por hacer.

 

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Con información e imágenes cortesía de Ambulante.