Cuatro breves sobre un pedacito de México

Por Enrique Figueroa Anaya.

Existen muchas historias que desconocemos; muchas realidades con raíces tan profundas que dejamos a un lado cuando intentamos analizar el contexto nacional. México es un país muy grande. Difícil definir quién y cómo es el mexicano.

Cuatro breves sobre un pedacito de México.

A continuación presento cuatro historias breves que dan muestra de situaciones que deberíamos tener en cuenta cuando pensamos en cambio. Seguro ustedes conocen más… no dejen de compartirlas.

Pegó, huyó y amenazó

Todo sucedió un miércoles a eso de las 19:30 horas. Con la calma que me caracteriza actualmente al volante, manejaba con rumbo a Xochimilco para dejar a una amiga a su casa. Todo fluyó con normalidad hasta que un policía me pegó con su camioneta y se fue. Nunca me había pasado, pero aquella vez, exploté y lo perseguí. Manejé hasta el Reclusorio Preventivio Varonil Sur y lo encaré. ¿Qué logré? Me llevé una amenaza de ser encañonado y la frase «hazle como quieras».

¿Quieres mi voto? Mínimo dame algo ya que nunca lo haces

Escuchaba en la radio a la política hidalguense Xóchitl Gálvez. En entrevista con Salvador Camarena, por W Radio, la política contaba cómo en algunas comunidades de Hidalgo se encontró con líderes que le comentaban que en esos sitios la gente no votaba al menos que se les diera algo. La lógica no podría ser más sensata. Comunidades enteras que por tradición saben que los políticos sólo les responden cuando piden sus votos, no pueden más que seguir esa misma lógica y pedir algo a cambio. ¿Serán muy distintos los políticos de los primeros años del México independiente a los del México contemporáneo?

Ese venenoso centralismo

Platicaba la semana pasada con unos amigos del estado de Nuevo León. En esa charla se platicó que les desesperaba saber cómo los chilangos seguimos creyendo que somos la voz del país entero. Uno de ellos, bastante molesto, me dijo que muchos de sus conocidos votaron en el norte contra López Obrador y a favor de Peña Nieto para demostrar que México es mucho más que el centro. El centralismo mexicano sigue vigente; ese peligroso centralismo que tanto daño le ha hecho al país.

El burócrata especialista en sacar copias

Un amigo que trabaja en el servicio público me contó que entre tanto burócrata con el que labora se encuentra Don Fidencio. Fidencio tiene una larga trayectoria como burócrata donde inició como archivero; hoy todo ese archivo está digitalizado y el archivista ha sido rebasado por el tiempo y la tecnología. «A veces me trae el café, los periódicos y demás», me contaba mi amigo, «pero en realidad Don Fidencio es un burócrata especialista en sacar copias. ¿Te puedes imaginar eso? Le pagamos a un burócrata para que sólo saque copias«.