La revolución de los zombies, una reseña de “Juan of the dead”

Por Ana Escárcega.

Una comedia política de acción y zombies suena bien, ¿no? Pues resulta mejor aún de lo que suena, Juan of the dead es una sátira implacable y una reflexión sobre la revolución cubana 50 años después; la disidencia, los cubanos en sí, la desesperación de un pueblo que ha vivido oprimido y sus formas de desahogar dicha desesperación, todo esto envuelto en una divertida comedia y con un moño de acción con zombies. Honestamente, no se puede pedir más.

La revolución de los zombies, una reseña de “Juan of the dead”.

El discurso político resulta clarísimo, real, tangible y doloroso, pero cubanos al fin y al cabo, todo se toma con filosofía, música, ron, mujeres y mucha risa.

Un extraño virus se está apoderando de la isla, el gobierno, para variar, culpa de todo a los yanquis y a los disidentes, pero pronto se dan cuenta de que esta vez no son los yanquis, esta vez es una amenaza real.

En medio de todo está Juan, que junto con su hija y amigos forman un grupo de exterminadores de zombies: “Juan de los muertos, matamos a sus seres queridos” es el lema.

Un grupo de personajes divertidos y originales que a la par de la película van haciendo críticas al gobierno del país y un montón de paisajes y anécdotas que son lugares comunes cuando se habla del socialismo y de Fidel; se siente una desesperante necesidad de escapar de la isla a como de lugar y a los héroes no les queda de otra que irse a Miami… ¿les suena?

Me parece inquietante, sin embargo, una cosa, una duda que carcome mis entrañas, ¿cómo le hizo el director de la cinta, Alejandro Brugués, para obtener los permisos necesarios para la liberación de la película en Cuba? Porque es finalmente una crítica muy fuerte al gobierno cubano, al socialismo y al mismo Fidel Castro.

Desgraciadamente, me quedé con la duda atorada en la garganta pues el vuelo del director se había retrasado y no pudo hablar con la prensa al respecto; lo que me resta es recomendarles de todo corazón esta cinta, que aún sin intensiones de verla desde su tinte político, la disfrutarán enormemente y les sacará muchas carcajadas, se trata de una película que ha sido muy bien recibida por la crítica en el mundo y sobre todo, (¡sorpresa!) en Estados Unidos.

Sin intensión de spoilearles el final, cabe mencionar que es una metáfora preciosa del sentir de muchos cubanos: el amor por la patria que, triste, lacerante y moribunda, es de todos modos la patria, un sentimiento que queda en un sabor de boca a nostalgia al salir de la sala de cine, además de la sonrisa que seguro también les van a dejar los personajes como “la China” o “el California”.

100% recomendable esta cinta cubana que seguramente va a dar más de qué hablar.