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En medio de una muy animada Casa Francia, se entregó ayer jueves 6 de septiembre el reconocimiento La Palmita al mejor cortometraje mexicano realizado en 2012 bajo el auspicio del Instituto Mexicano de la Cinematografía (IMCINE).
19 cortometrajes producidos por el IMCINE durante el primer semestre de 2012 fueron los trabajos que participaron por este premio que, además de La Palmita, otorga una invitación a Francia para asistir al Festival Internacional de Cortometraje Clemont Ferrand.
La tiricia o cómo curar la tristeza, una historia con orígen en la natal Oaxaca de Ángeles Cruz, realizadora de este cortometraje, fue el trabajo premiado. La entrega de La Palmita corrió a cargo del actor invitado Eugenio Derbez en nombre del jurado que constó de personalidades como: Arcelia Ramírez, Luis Roberto Guzmán, Lucero Solorzano y Roberto Fiesco, entre otros.
La historia basada en el guión de Ángeles Cruz y María Renée Prudencio retrata la historia de tres generaciones que andan tiricientas (la tiricia es una enfermedad del alma cuando el corazón entristece). Ita, Justa y Alicia han padecido la enfermedad con la que Alicia decide romper. En 10 minutos el espectador observa con detenimiento este trabajo que se proyectará junto a otros 18 cortometrajes antes de cada película del 16° Tour de Cine Francés.
Los cortometrajes participantes fueron: Bajo el sol, de Arcadi Palerm; Clarissa, de Víctor Audiffred; Cuando despierte, de Yoame Escamilla Del Arenal; Defectuosos, de Gabriela Martínez Garza y Jon Fernández López; Dentro de uno, de Salvador Aguirre; Un domingo cualquiera, de Claudia de la Cabada, La herida de Lucrecia, de Sabrina Maldonado, Huellita, de Ehécatl García; Ismael, de Sebastián Hofmann; El jazz, de Andrés Peralta; Lucy vs. los límites de la voz, de Mónica Herrera; La noria, de Karla Castañeda; Un ojo, de Lorenza Manrique; Quince años, de Liliana Torres; Shui, de Bárbara Balsategui; Sueña, de Ana Zamboni; Las tardes de Tintico, de Alejandro García Caballero, El último consejo, de Itandehui Jansen y por supuesto; La tiricia o como curar la tristeza, de Ángeles Cruz.
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