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Escrita, producida y dirigida por Duncan Bridgeman, acompañado por la siempre certera Lynn Fainchtein, Hecho en México es un trabajo que cumple con lo que se espera de ella. No nos ofrece una respuesta clara a las preguntas tan complejas que plantea; pero sí sirve como la partida para una relfexión.
¿Qué es el alma? ¿Cuáles son las diferencias entre hombres y mujeres? ¿Qué es mexicano? Estas son algunas de las preguntas que lanza una película en la que nos guía una inmensa cantidad de músicos, de diversos géneros, que nos van invitando a ser parte de un viaje lleno de colores, frases, sabores y olores. Así de diverso, como el país, así es Hecho en México.
La introducción de personalidades como Daniel Giménez Cacho, Elena Poniatowska, Héctor Aguilar Camín y Juan Villoro, entre otros, da una perspectiva general de hechos que no debemos dejar a un lado, y que si bien forman parte de la columna vertebral reflexiva del trabajo, no hacen que se convierta en algo pretencioso. Se colocan los acentos donde deben de colocarse.
Rubén Albarrán, Amandititita, Lila Downs, Natalia Lafourcade, Camilo Lara, León Larregui, Pato Machete y Carla Morrison, son algunos de los músicos que nos acompañan en este viaje sonoro que los mezcla con distintos y muy diversos músicos. De ese modo nos encontramos maravillas musicales como el tema mismo de la película, ¿Quién lleva los pantalones?, colaboración entre el Instituto Mexicano del Sonido y Venado Azul (sin duda uno de los momentos más divertidos de la película).
Mención aparte merece el que a mi parecer fue el momento más emotivo de la cinta. Chavela Vargas, fallecida recientemente, habla sobre la muerte en una escena a la que además se le suma una interpretación de esas que agitan el corazón y hacen nudos en las gargantas.
Hecho en México es un trabajo visual y sonoro de mucha calidad; una película que se disfruta y que generará en el espectador, por lo pronto el mexicano, que se pregunte sobre muchos de los temas que ahí se abordan. Además siento que la película, a pesar del título y del evidente entorno propio del país, sirve como plataforma para plantearnos en sí que dentro y fuera del país hay muchos elementos que nos hermanan en algo más complejo como lo es el pertenecer a este planeta.
Eso sí, si planean asistir a verla a partir de este viernes 21 de septiembre (fecha de estreno de Hecho en México), cerciórense de que sea en una sala donde se escuche y vea bien. Es importantísimo explotar al cien la tremenda diversidad musical que reúne la película.
Imágenes cortesía de Videocine.
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