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Por Andrea Karan.
No podríamos cerrar el mes de octubre sin mencionar otro tipo de cáncer que aqueja a muchas mujeres: el cáncer cervicouterino. Este tipo de cáncer se puede desarrollar a cualquier edad por lo que es muy importante que las mujeres se realicen una citología vaginal con papanicolau por lo menos una vez al año.
A diferencia de otros tipos de cáncer, este se puede prevenir porque con el simple hecho de realizar el examen se puede curar al 100% cualquier situación precancerosa. Regularmente, es ocasionado por el Virus del Papiloma Humano (VPH) que se transmite por vía sexual, por lo que será muy importante que en las relaciones sexuales se haga uso del preservativo, especialmente para aquellas mujeres que realizan “prácticas de riesgo” o cuentan con más de una pareja sexual.
Como lo hemos mencionado anteriormente, el hecho de realizar este examen, es muy importante por lo que hay que perder el miedo y la pena con los doctores. Existen mujeres que se sienten más cómodas visitando un médico ginecólogo que sea mujer, porque les incomoda que un hombre mire su cuerpo. De cualquier forma es muy importante el chequeo médico para evitar que alguna afección no descubierta se convierta en una terrible enfermedad como el cáncer.
El procedimiento para realizar el estudio, es relativamente sencillo. La paciente se recostará en una camilla, colocando sus piernas abiertas y flexionadas, similar a como las colocan al momento del parto. El siguiente paso será que el médico introducirá una herramienta llamada espejo. Es muy importante revisar que el espejo sea nuevo; lo tendrán que sacar de una bolsa de plástico sellada. El espejo “abrirá” la vagina para poder ubicar al cérvix en el cual se aplicarán diversas sustancias entre ellas el agua yodada para descartar cualquier tipo de herida maligna. Enseguida se toman fotografías que reaccionan con esos líquidos, y finalmente se toma un poco de tejido para analizarlo. Si la paciente coopera con el estudio, el mismo no debe dilatar los 15 o 20 minutos.
Es muy importante que como mujeres nos cuidemos, ya que sin salud no se pueden lograr otro tipo de proyectos en la vida. Asimismo, será importante dejar fuera el temor a los estudios. Son quince o veinte minutos que nos podrán salvar la vida.
Nos leemos pronto.
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