Calles de México: Sobre los nombres de las calles, parte 1

Por Enrique Figueroa Anaya.

Nada como caminar por las calles para conocer una ciudad… En este espacio semanal recorreremos tan solo algunos de esos caminos, caminos que por cierto, guardan historias, anécdotas, recuerdos, edificios y más. Sin embargo, para entender la riqueza que se puede sacar de las calles, habrá que empezar como bien dicen: por el principio.

Calles de México: Sobre los nombres de las calles, parte 1.

Es a través de los nombre de las calles donde comenzamos nuestro camino, ya que por medio de ese conocimiento, nos será psoible desentrañar la historia física y moral de una ciudad.

En la ciudad de México nos encontramos con una variedad impresionante de nombres para las calles. A través de ellas, es posible encontrarnos con los recuerdos de la extinta Tenochtitlan. Son nombres como Cocolmeca, Chiconautla, Huacalco, Titzapan, Tlatilco y otros, los que nos hacen recordar las raíces indígenas de la hoy imponente, y mestiza, ciudad de México. Es más, de esos nombres aún hay calles que guardan inclusive los trazos originales, como sucede en el caso de Tlacopan o Tacuba (calle de la que ya hablé aquí), así como el de Itztapalapan. Por esos caminos no solo han pasado millones de vidas, sino también la historia misma; por la primera entraron los españoles a la capital de los mexicas, mientras que por la segunda huyeron en la denominada Noche Triste.

De la época colonial también existen vestigios en los nombres de las calles. Tal es el caso de las que recuerdan sucesos históricos o tradicionales, fundaciones piadosas o establecimientos de beneficiencia, algunas otras, inclusive guardan los apellidos ilustres de vecinos de aquella época.

De tiempos más recientes, está de más explicar el origen de 16 de septiembre, 20 de noviembre, Insurgentes o Revolución.

Es entonces que queda en evidencia que a través de las calles es posible entender a la ciudad y a sus habitantes. Por eso, y a partir de cada semana, viajaremos por alguna de ellas, para entenderlas y entendernos, para conocerlas y conocernos…