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Hoy en día la industria de la música se ha vuelto algo limitada, a la cual solo algunos artistas que tienen muy bien definido el sonido que quieren transmitir logran tener un impacto en las masas.
No solo es una buena rola y ya, el sonido tiene que innovar y no puede ser un refrito de algo ya escuchado, ahí lo difícil, donde los resultados interesantes se dan en las arduas horas de la producción de las canciones.
Con tantos proyectos aflorando, el trabajo se ha vuelto más intenso en casa y en el estudio. La creación musical ha adoptado un poco de ciencia, en la cual los sonidos son las herramientas de trabajo. Se tiene que investigar, recolectar y experimentar para obtener algo nuevo.
Conocer las corrientes musicales que van emergiendo y las que van de salida, es parte de la investigación, el Internet ha facilitado mucho esto. Una vez investigadas las tendencias, empieza la recolección de sonidos de diferentes lados, ya con estos sonidos la experimentación a través de la mezcla y de la modificación de estructuras lleva a la creación, todo parte de una base pero tiene que terminar en algo diferente, una nueva brecha de sonido tiene que ser creada. Las múltiples combinaciones posibles con diferentes sonidos, hacen la experimentación y la creación algo meticuloso, dándole lo científico a la música, esto junto con el talento y la sensibilidad trae resultados interesantes.
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