Hoy toca: Uno de los consentidos, el Paraíso del Sur

Por Enrique Figueroa Anaya.

Hace unos días me escribía alguien para preguntarme que «cómo era posible que escribiera de moteles y firmara con mi nombre». Me quedé pensativo frente a su comentario, porque me sorprendía que fuera algo «increíble»; al fin, ¿qué tiene de malo escribir de moteles? Como en todo, hay moteles buenos y moteles malos; aquí se invita a los buenos.

Hoy toca: Uno de los consentidos, el Paraíso del Sur.

Ya lo dijo Lennon: «Vivimos en un mundo donde nos escondemos para hacer el amor, mientras la violencia se practica a plena luz del día.» Yo no veo nada malo en escribir sobre moteles; sitios que sirven para escapar de lo cotidiano de la vida en pareja, y espacios de aventura para los jóvenes amores. Aquí el único «pero» que se hace es para que los lugares que se reseñan, cumplan con seguridad, higiene y ese toque de diversión.

En fin, hoy toca uno de los moteles favoritos, no sólo para un servidor, sino para una gran mayoría en la red. Se trata del Paraíso del Sur ubicado en la Carretera Federal a Cuernavaca #5109. Así es, en medio de una variedad nada despreciable de moteles, el Paraíso del Sur se destaca.

Con costos que van de los $330.00 a los $1,800.00, la Villa Paraíso (la más cara) fue la seleccionada. ¡¿Qué?! ¡¿$1,800.00 por una habitación?! Vamos, si se trata de una breve escapada, probablemente sea un gasto que luzca sorprendente, pero si se trata de una bien pensada salida para sorprender a la pareja… bien lo vale.

La villa, que no es más que un pequeño edificio de dos pisos con una alberca incluída, tiene un jacuzzi y un camastro flotante. Además, hay otros dos camastros fuera de la alberca, y una pequeña salita, con sillas y sillón, además de una televisión. En la parte de arriba, una habitación.

Cabe destacar que el lugar es tranquilo y que la alberca está protegida por un domo; por aquello de los mirones y curiosos. Además, por si su imaginación no se desborda con lo que ya hay, existe un columpio para que utilicen como mejor les plazca.

La verdad se trata de un sitio agradable, con buenos precios en la comida y con la tranquilidad de que cada centavo lo vale. Quizá un tema sea el del tiempo, que si bien no me dieron en su momento, es probable que haya que consultarlo antes para no andar pensando en «cuánto nos faltará» en lugar de «cómo lo pasaré».

El teléfono es el 5573 0044, por si tienen alguna duda; si van, no dejen de avisar cómo les fue.