De cómo los niños y adolescentes están salvando al libro (y viceversa)

Por Lorena Salcedo.

Hoy escuché en el noticiario que el dólar está en 15.80 pesos… o sea, estamos jodidos. Todavía me acuerdo cuando creía que con 25 pesos podía comprar TODO en la vida: una cajita feliz (ahora de $50), un boleto del cine (que actualmente cuesta más de $70) y la caseta a Cuernavaca (que estaba en $90 hace unos meses pero tras las noticias de inseguridad en Morelos y Guerrero, tuvo que bajar a $50 para “animar” a la gente a viajar). Total que ahora no me puedo comprar ni una Pica Goma con 50 centavos.

Y claro que la cultura, incluida la industria editorial, se ha visto afectada no sólo en México. Es un fenómeno mundial, porque aunque no nos guste admitirlo, los libros y la cultura en general son un bien de lujo. Pero aún cuando desde 2008 la facturación del sector editorial ha caído en un 31% (algo así como 1,300 millones de euros), hay buenas noticias. Muy buenas diría yo, porque al parecer los niños y jóvenes sí están leyendo pues desde hace ya varios años, los títulos más vendidos son de literatura infantil y juvenil.

No importa si es en formato físico o digital, los libros para adolescentes y niños son los más vendidos, la Feria Internacional de Guadalajara reportó que la mayor parte de las ventas que se hicieron en la Feria en 2014 fueron de LIJ (literatura infantil y juvenil). Es cierto que mucho de eso puede carecer de calidad literaria pero, ¿qué no todos empezamos leyendo Harry Potter en el mejor de los casos? Yo al menos me declaro culpable de haber entrado al género de la novela, de la mano de una maestra de secundaria y Paulo Coehlo.

Mientras muchas lecturas juveniles están centradas en vampiros, amores de high school y amistades inquebrantables, hay más. Benito Taibo, Toño Malpica y Verónica Murguía están haciendo lo suyo para llevar calidad literaria a los jóvenes. Igual pasa con la literatura infantil que muchas veces relacionamos con princesas, diminutivos y cuentos que ni los más chiquitos se tragan. Los libros ilustrados también están transformando el panorama; recientemente la editorial El Zorro Rojo, enfocada en producir libros ilustrados para “adultos”, ganó en la Feria Internacional del Libro de Bolonia como mejor editorial europea.

Así que aunque los libros, como todo, cada vez están más caros, hay personas que siguen pensando que es bueno invertir en esa extraña actividad llamada lectura. Lo mejor de todo es que esas personas son jóvenes y niños, generaciones que al parecer están rescatando al libro de la crisis económica generada por los “grandísimos” adultos.