Por Asfaltos.
Iba caminando por las calles de esta ciudad, bajo una lluvia tremenda, intentando tomar el primer microbús que se dejara pescar, cuando de repente me caí. Caí en un charco, y además de la humillante escena, terminé lastimado. Por suerte, queridos lectores, había salvado mi reproductor de música y aún llevaba conmigo mis audífonos que colgaban de mi cuello. Tláloc, bendito sea tu gusto por la música.
Al levantarme e intentar tomar el primer camión que se apiadara de mi muy lastimosa condición, lo primero que hice fue poner música, y sí, la canción que se me apareció parecía enviada para animarme. Con la inocencia de aquellos años 60’s mexicanos, los Blue Caps pertenecen hoy al imaginario musical nacional por su famosísimo tema «Vuelve primavera», ese que en con su muy alegre coro pide de vuelta el clima benévolo de cielos azules y soles esplendorosos; y sí, ese que se me apareció aquella lluviosa noche.
Los Blue Caps tuvieron un éxito efervescente, y es que así como pronto subieron sus niveles de fama, pronto desaparecieron sin siquiera regalarnos un LP que presumir en nuestros días, y apenas tres EP que son codiciados por todo buen coleccionista de música en este país.
Irónicamente, a ese grupo que cantaba la alegre «Vuelve primavera», le llegó la tragedia. René Ferrer, vocalista de Blue Caps, así como de los Playboys y los Salvajes, moriría a los 22 años en octubre de 1962 a raíz de una golpiza provocada por policías que lo detuvieron en la colonia Obrera por orinar en la calle.
El inmortal legado de Ferrer, y Blue Caps, es hoy un tesoro perseguido con nostálgia por aquellos arquéologos y amantes del rock & roll en México.
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