Por Asfaltos.
La celebración por el aniversario de la fundación de Mexico-Tenochtitlan fue el marco perfecto para la presentación de Zol Negro los pasados 24 y 25 de julio en Plaza Santo Domingo del Centro Histórico de Ciudad de México.
Desde su entrada al escenario, la gente logró sentir la magia y el poder expresivo de la banda, misma que inició tocando ritmos prehispánicos con su poderoso set de percusiones, acompañando de una tremendamente emotiva apertura del concierto-ofrenda-ritual con el saludo a los cuatro rumbos del universo, y la danza prehispánica realizada por su única integrante Yei Kalli.
La conexión con el público fue total. Zol Negro transmitió su mensaje de orgullo y amor por la tradición y la cultura mexicana, con canciones como «Guerrerozol», «Mazehualli», «Bezarlatierra», y la melancólica interpretación de «Tlalohkan» sobre el último mensaje de Cuauhtémoc a su pueblo.
«Nuestro sol se ocultó,
nuestro sol desapareció su rostro
y en completa oscuridad nos ha dejado.
Pero sabemos que otra vez volverá,
que otra vez saldrá
y nuevamente nos alumbrará.»
Ocho integrantes en perfecta armonía realizaron ejecuciones limpias y llenas de sentimiento, en los diversos instrumentos que conforman al grupo (bajo, tres sets de percusiones, tres guitarras y cuatro voces), sin olvidar la grata presencia de la danza y poesía que terminan de complementar el mensaje de la banda.
La presencia de Zol Negro denotó el carácter juvenil y la energía del rock en comunión con la tradición y la cultura prehispánica dejando ver un resultado rico en calidad y belleza producto de la vida urbanizada, pero llena de historia que sucede en la actual Ciudad de México o debería decir: ¿Mexico-Tenochtitlan?
Zol Negro representa el orgullo y la pasión por la historia y la cultura de nuestros antepasados, sin dejar de lado la realidad urbanizada y moderna de la que somos parte; y este fin de semana logró hacer temblar el escenario y mover las emociones de todos los que estuvieron ahí para escuchar.
«Ahora nosotros les encargamos a nuestros hijos,
que no olviden informar a sus hijos
cuán buena será, cómo se levantará
y alcanzará fuerza.Y cuán bien realizará su gran destino,
ésto nuestra amada madre tierra Anahuac.»
Con información e imágenes (Jazmín Bucio, Mario Castañeda) cortesía de Yestli.
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