- Tweet
Por Elizabeth Aguilar Quintana.
El tiempo nos ha dado la razón: actuar unidos siempre es mejor que uno solo. A lo largo de nuestra historia con la necesidad y los problemas presentes en todas épocas, se ha presentado la oportunidad para reflexionar. ¿Qué se ha hecho, qué hacemos, qué se hará?, ¿te quejas con los organismos correspondientes, construyes una narrativa social que se extienda por tu comunidad, actúas y tratas de solucionarlo o usas mecanismos de presión frente al Estado?
Día a día, en muchas partes del mundo, la sociedad civil contribuye al fomento y resguardo de los derechos humanos. Pero ¿qué es la sociedad civil exactamente, qué hace, cuándo y cómo se ha manifestado?
El concepto de sociedad civil se ha construido a lo largo de la historia como la ruptura de un paradigma estatocéntrico; es la viva expresión del pluralismo existente en la sociedad.
En muchos de los casos la población civil se organizó llenando vacíos que el Estado ha ido dejando o en situaciones que rebasan el actuar del mismo.
Esta ruptura nos ha llevado a la búsqueda de la unión y la solidaridad, reflejándose en el actuar de la buena voluntad, no esperando únicamente a que el Estado actúe. Tal es el caso del surgimiento de una de las organizaciones más nobles a lo largo de la historia: La Cruz Roja quien promueve la humanidad, la imparcialidad, neutralidad, independencia, voluntariado, unidad y universalidad.
Sin embargo, el surgimiento no quedó estático, se ha ido transformando con el paso del tiempo, al igual que la economía, se subió al tren de la globalización y se ha fortalecido con las herramientas del progreso. Esta transformación se ha proyectado en la constante vigilancia del actuar del Estado, le ha monitoreado y fijado metas que día a día ha permitido el perfeccionamiento y la transformación de la democracia.
Paso a paso la sociedad civil organizada se ha planteado metas para la búsqueda del respeto a nuestros derechos fundamentales. La actuación a nivel internacional es más que evidente y deja de manifiesto que cuando existe la voluntad las fronteras no existen. Múltiples logros de la sociedad civil organizada como, los de Amnistía Internacional ha permitido que el avance en la tutela de nuestros derechos deje precedente, llenando vacíos y presionando en momentos en que los derechos de alguna persona son violados.
Nos hemos movilizado para cambiar nuestro entorno, nuestro gobierno y mejorar nuestras oportunidades, no debemos permitir que el avance logrado a lo largo de siglos se vea obstaculizado por nadie, ya sea la tiranía de un Estado o el deseo de poder de algunos con una máscara de protección, cuando en realidad lo que fomentan es la censura. Para la participación y unión no existen fronteras, ni obstáculos, sólo un camino al que todos debemos estar dispuestos a mejorar.
Yo no conocía esta publicación RECONOCE, pero a raíz de la invitación que me hizo un amigo, y de leer a Elizabeth Aguilar por segunda semana, veo que es un buen blog, con artículos muy interesantes y de excelente contenido. Felididades a la autora y a la editorial.
¡Saludos Axel! Qué gusto leer tu comentario. Nos llena de emoción leer que te ha gustado el espacio. Venimos con todo en este 2012. Te invitamos a que nos leas constantemente. ¿Algún tema que te interese en especial? ¡Saludos!