El punto, todos lo usan y nadie sabe para qué sirve

Por Laura Ramírez.
Ilustración Niña Papalote.

Pues ya entendimos que las comas son amigas y que debemos abrir los signos de admiración o interrogación. Bien por nosotros. Ahora, tenemos otra cosa que aprender con sangre: cómo usar un punto.

El punto, todos lo usan y nadie sabe para qué sirve.

Y es que el punto es el más sencillo de los signos de puntuación y el más hecho a un lado. Pobrecito. ¿Cómo es esto? Todos lo usan -correcta o incorrectamente- y nadie sabe para qué sirve.

Volvamos al inicio de esta columna. Los signos de puntuación nos ayudan a generar pausas al leer similares a las que usamos, para tomar aire, al hablar. El punto sirve para hacer una pausa final y cambiar de idea.

Así, tal cual, cambiar de idea. Facilito y sin pretensiones. Imagina que estás hablando de accidentes de auto y, de pronto, piensas en qué pasaría si una nave extraterrestre cayera sobre tu coche, lo cual te lleva a preguntar sobre la vida en otros planetas.

No creo que dijeras algo así como “La mayor parte de los accidentes se producen por el consumo de alcohol y venir usando el celular por eso creo que existe vida en Marte”. ¿Verdad?

El punto sirve para separar esas dos cosas que no tienen nada que ver, pero que se relacionaron extrañamente en tu cabeza.

Hay tres tipos básicos de punto: punto y seguido, punto y aparte y punto final.

Punto y seguido

El punto y seguido sirve para separar enunciados que forman parte del mismo párrafo. Es decir, si pones punto y seguido, debes seguir escribiendo sin darle “enter”.

Sí, sí, ya sé que dije que separaba ideas. ¡Y lo hace! Pero ideas que tienen algún tipo de relación.

Por ejemplo:

Vamos por unas chelas en la noche. Al parecer, no hará mucho frío y podemos pedir una mesa en la terraza. Podríamos fumar y ver las estrellas.

¿Ves? Son ideas distintas, en una parte hablamos de las chelas, en otras de la terraza y el clima, y en la última de las estrellas y el cigarro.

Punto y aparte

El punto y aparte separa dos párrafos distintos con ideas diferentes, pero dentro de una misma unidad.  Es decir, después le das “enter”.

Debo decirte que siempre que escribas un punto y aparte, debes cambiar la línea de tu texto e iniciar la primera palabra con un espacio mayor, ya sea que uses sangría o que des dos “enters”.

Por ejemplo:

Vamos por unas chelas en la noche. Al parecer, no hará mucho frío y podemos pedir una mesa en la terraza. Podríamos fumar y ver las estrellas.

El bar tiene poco que se inauguró, pero le ha ido muy bien. Te va a gustar.

¿Ves? Son ideas distintas porque en la primera parte hablamos de las actividades que se hacen en una fiesta y en la segunda, del lugar. Pero más o menos, estamos en el mismo canal

Punto final

Bueno, cuando ya acabaste tu texto, tu idea, tu asunto, le das punto final y listo.

Ahora, unos bonitos tips para usar el punto:

1. Después de abreviaciones, pon un punto.
2. Si vas a usar comillas o paréntisis, el punto va AFUERA.
3. Los títulos NUNCA llevan punto.

Ahora sí, usa el punto libremente.