Por Asfaltos.
Por más que me guste su música, hay que ser ciertos al afirmar que los miembros de Coldplay no son los músicos más talentosos del mundo; pero también habría que aceptar que si algo tienen de sobra, es corazón. Su más reciente presentación en el aclamado Glastonbury del fin de semana pasado, lo comprobó una vez más.
Arriba de uno de los escenarios más importantes del mundo para cualquier banda, los cuatro músicos de Coldplay, bajo el liderazgo de su cantante Chris Martin, rindieron un muy emotivo tributo a una banda que les recordó a ellos en sus inicios, por ahí de un ya muy lejano 1996.
Tras la que había sido su primera presentación fuera de su país, en el festival Where’s the Music? de Norrköping, Suecia, los cuatro miembros de la banda murieron en un accidente de auto tras caerse de un puente en la autopista E4 Södertälje, al suroeste de Estocolmo. Con edades que iban de los 19 a los 32 años, de un golpe se apagaron las vidas de los músicos que apenas emprendían un viaje musical con destino incierto, pero muy seguramente con las ilusiones intactas de en lo que querían convertirse.
Pues bien, regresando a Coldplay, su vocalista Chris Martin contó sobre el escenario más importante de cualquier festival musical en el mundo, que los Viola Beach «nos recordó a nosotros, y a todas las otras bandas que vienen por aquí; la emoción y la alegría y la esperanza». En uno de los momentos más emotivos del pasado Glastonbury 2016, Coldplay le permitió a los Viola Beach tener una «alternativa de futuro para ellos, y permitirles tocar en Glastonbury para una canción. Esto es lo que tal vez habrían sido ustedes en veinte años… espero hacerle justicia a su canción».
Lo dicho, Coldplay se ha ganado a sus fanáticos por su corazón… Gracias por mostrarnos, a los que no les conocíamos, a los Viola Beach.
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