Por Sandyluz.
Vísperas del 70 aniversario de la independencia de la República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte). El 15 de agosto de 1945, con la disolución del dominio japonés, una parte de este territorio, la franja norte, se proclama un estado socialista. Con la influencia del régimen ruso, y negándose a llevar a cabo unas elecciones amparadas por la ONU (Organización de Naciones Unidas), Corea del Norte inicia una travesía tenaz, hacia la delimitación geográfica e ideológica de sus fronteras, teniendo a la cabeza al presidente eterno –literalmente llamado así– Kim Il-sung.
Con motivo de la celebración de su «independencia», los coreanos deciden, de manera sorpresiva e inédita, convocar a un grupo de rock que desmienta que son anticuados y cerrados como tanto se asevera. Su conservador gobierno invita al magno evento, nada más y nada menos que al grupo esloveno Laibach, el cual, además de europeo y disruptivo, es, irónicamente considerado por el los norcoreanos, un sustento de ideología fascista, en apoyo a sus tradiciones y prácticas sociales; nadie mejor que ellos para encabezar los festejos.
«Día de la Independencia» es un largometraje que nos muestra la logística y pormenores de esta hazaña, en donde deben converger, pacíficamente, las ideas occidentales y orientales; en donde se cree, con fervor, en las ventajas y perdurabilidad de un régimen totalitario.
Hablando de la banda, sí, Laibach, además de ser precursor de otra banda tan sólida y conocida como Rammstein, cabe decir que tiene un estilo muy auténtico y fincado en ideas políticas radicales. Surgió en 1980, como un grupo de asociación juvenil cultural, en la ya inexistente Yugoslavia; con un estilo de rock industrial, logra amalgamar el arte propagandístico nazi y el realismo socialista, en sus composiciones musicales. Las apariciones públicas del grupo son consideradas, por ellos mismos, «acciones» encauzadas a la discusión política. El grupo, desde sus inicios, ha enfrentado la censura y polémica, incluso en su país de origen, donde, el mismo grupo de obreros que los vio nacer, los denunció; ya luego de que acudieran a la televisión eslovena, fueron vetados definitivamente. Por todo esto, es de asombrar que, justamente, una Corea tan reticente a cuestionamientos y críticas sociales, les abra las puertas.
En palabras de los miembros del grupo, tanto Corea del Norte como Laibach tienen algo en común: han sido mal interpretados, razón suficiente para lograr una alianza. Laibach es un grupo de rock perturbador que, en aras de alcanzar «la verdad», desdeña la paz y se burla de las dictaduras del mundo. Laibach, como parte de su estilo, toma canciones que fueron y son éxitos de ventas mundiales (por ejemplo, «Live is life» del grupo Opus) y las reconceptualiza, con su respectiva carga cruda e irónica; luego, con su propuesta critican a la industria musical capitalista y a los cantantes carentes de sustento ideológico: Tomaron el tema del filme «La novicia rebelde» y derivaron de él «Airsong», una canción con tintes oscuros, sobre políticas separatistas, muy ad hoc a lo que celebra Corea del Norte en su fiesta nacional.
Así, un grupo como Laibach, considerado materia tóxica, es invitado a una nación purista y aparentemente aislada del mundo. ¿No podrían acaso intoxicar al pueblo coreano con sus ideas radicales? El estira y afloja de cómo lograr la comunión, entre un grupo de rock irreverente y el gobierno riguroso, con todo y su comité de censura, es el núcleo de este documental. «Día de la Independencia» nos muestra con detalle las conversaciones y momentos ríspidos que ocurrieron tras bambalinas, para concretar el concierto.
Uno de los dilemas, presentados en el largometraje, fue la canción nacional coreana «Monte Paektuk», la cual alaba al líder coreano, Kim Il-sung. ¿La versión de Laibach podría ser ofensiva? Se optó por traducir algunas de sus líneas a coreano (a sabiendas que la lengua de Corea del Norte realmente presenta variantes fonéticas, con respecto al coreano que hablan los vecinos del sur). Finalmente, luego de acaloradas discusiones con el comité de censura de la nación, para sorpresa de todos, se prefirió dejar las líneas en alemán, evitando con ello que su canción sonara «a Corea del Sur». También, algunas proyecciones de fondo para el concierto y decisiones individuales de vestuario fueron un reto para la paciencia del grupo, quienes, con todo, sabían el gran logro que implicaba ser el primer grupo de rock en ofrecer un concierto en este país.
«Día de la Independencia» explora la hazaña que significó llevar un grupo musical occidental a un mundo oriental y socialista, en donde es tan común portar camisa de fuerza. El régimen coreano anhelaba mostrarse relajado y abierto, permitiendo que su gente viera un espectáculo nunca antes visto. Laibach buscaba hacer historia, con su rock industrial, poniendo la primera piedra en este régimen virgen. Al final, el dilema moral de Laibach: ¿qué tan bueno es inquietar con ideas subversivas la mente de gente coreana, aparentemente feliz? «Día de la Independencia», documental histórico, novedoso, y del todo interesante, plantea la paradoja de ser feliz con los ojos cerrados o ser infeliz con los ojos abiertos.
Ambulante Gira de Documentales 2017 se realiza desde hoy 23 de marzo y hasta al 25 de mayo de 2017 en diversas sedes en México y Ciudad de México. Para más información consulta el sitio oficial de Ambulante Gira de Documentales.
Con información e imágenes cortesía de IQ Icunacury Acosta & Co.
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