Por Asfaltos.
Hay de nacos, a nacos. Para usted, estimado lector, ¿qué es naco? Quizá, para usted, que me lee, yo sea un auténtico naco que se la pasa compartiendo rolas (y además dice «rola», chale) como la del día de hoy que no podría mas que clasificarse como «auténtica nacada». No lo sé, el hecho es que andaba en ese debraye gracias a un autentiquísimo NACO, ese sí con todas las letras en grande… en mayúsculas, pues.
Alguna vez presidente, y ojo, presidente nada mas porque la mitad del país no quería que ganara el llamado «Peje», el NACO al que me refiero es Felipe Calderón Hinojosa. Sí, ese del «haiga sido como haiga sido», terminó por mostrar el cobre hace unas semanas cuando lanzó en un tuitazo (que el muy NACO borró posteriormente), donde pedía a sus detractores que se seneran: «Ya serénense #pejechairos, están leyendo muchas encuestas. Están nerviosos y agresivos, más que de costumbre».
Sí, ese es el nivel del alguna vez expresidente Felipe Calderón; y que conste que su antecesor, el ranchero Vicente Fox Quesada, no se queda atrás… pero hay que ver el nivel de la gente se atreve a gobernar… Chingá. Si me cae que un teporochito tiene más dignidad que este auténtico nacazo de Calderón. En fin.
El asunto es que andaba en estos menesteres, cuando me acordé de la rola del rapero Anuar, quien reivindica a los nacos por ser lo que son, auténticos, ignorantes sí, pero no maliciosos… bueno, los que no lo son. En fin, que como digo, hasta en los nacos hay razas… ¿verdad Jelipillo? Chale, si va a tomar que mejor ni tuiteé.
Foto: Gerry Dincher.
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