La vida y el mar

Por Elizabeth Aguilar Quintana.

El mar es dulce y hermoso, pero puede ser cruel.

Somos agua, nuestro cuerpo es agua, el planeta es agua, el 71% de nuestro hogar es agua; si bien el agua dulce es fundamental para la supervivencia de la vida, el agua salada es otra de las partes importantes en nuestro planeta. Los océanos cumplen con tareas sumamente importantes para la vida, tales como, absorber y reflejar la luz del sol, almacenar calor, transportar el calor que almacenan; los océanos son responsables de la mayoría de los cambios del sistema climático, son la principal fuente de vapor de agua atmosférico e intercambian gases (como CO2) con la atmósfera

La vida y el mar.

Hablar de lo que ocurre en los océanos es hablar de la naturaleza misma, ya que todo lo que acontece en el mundo se encuentra interconectado, los fenómenos naturales nunca son aislados. El mar tiene un efecto regulador del clima local y hasta zonal. Cuando  hay tormentas marinas, también podemos hablar de brutales sequías y desajustes en el sistema climático.

El ser humano ha destruído todo lo que ha encontrado a su paso, ha deforestado vastas zonas de la Tierra, como el valle de Yang-Tsé en China donde la tala brutal ha hecho desaparecer el 85% de todos los árboles y ha traído como consecuencia las mayores inundaciones de la historia conocida; ha contaminado el mar con aguas negras, petróleo y múltiples contaminantes, sin considerar el daño al equilibrio ambiental. La contaminación plástica en el mar, por ejemplo, es un problema ambiental importante. Sin embargo, no existe una descripción cuantitativa de la envergadura de este problema en el océano. Es tanta nuestra necesidad de progreso que ni siquiera consideramos que toda la devastación pone en grave peligro la supervivencia humana.

En aras del progreso y la modernización hemos desaparecido especies en todos los ecosistemas y más allá de la pérdida intelectual que representan, la pérdida de cada especie representa la disminución del equilibrio en la naturaleza y sus ecosistemas, y por ende, un impacto considerable del futuro de la humanidad en esta Tierra.

La Organización de las Naciones Unidas define la contaminación marina como, » la introducción por el hombre en el medio marino, de sustancias o energías que puedan ocasionar consecuencias nefastas, tales como daño a los recursos biológicos y por consiguiente a la salud humana, trabas a las actividades marítimas, incluyendo la pesca, disminución en la calidad del agua del mar desde el punto de vista de su utilización, y reducción de las posibilidades ofrecidas para el descanso».

Es urgente la limpieza y conservación de nuestros mares, con el mar la vida lo es todo, sin el no existiría ella. Se debe entonces de llegar a un acuerdo tripartito entre la sociedad civil, las empresas y los gobiernos, ya que no podemos dejar pasar los enormes desastres ecológicos como el ocurrido en 2010 en el Golfo de México. Necesitamos acciones y legislación eficaz para combatir estos desastres.

Una de las herramientas más importantes es la educación, por lo tanto, debemos dar a conocer a la población el severo problema y el impacto a corto, mediano y largo plazo. Fundación Albatros es la primera fundación comprometida, a largo plazo, en realizar y distribuir gratuitamente producciones educativas. Ha desarrollado una nueva fórmula de distribución de información fidedigna a escalas masivas en América Latina y El Caribe. De esta manera busca incrementar la conciencia y educar sobre los temas sociales, culturales y ambientales más críticos para el desarrollo sostenible de la región. Debemos tomar acciones concretas, el mundo es un buen lugar, valdría la pena defenderlo.