Los juegos del baúl: ‘Silent Hill 3’

Por Fernando Riestra Carbajal.

Tras conocer la verdadera historia de nuestro protagonista James Sunderland de la pasada entrega, Konami decidió no hacernos esperar tanto y en el año de 2003 nos entregó la tercera parte de esta magnifica saga.

La historia continúa con Heather Morris, una típica adolescente que se encuentra de compras en un centro comercial como cualquier día de la semana. Todo cambia cuando Heather se ve inmersa en un mundo tétrico y completamente habitado por seres salidos de pesadilla o de los más recóndito de la obscuridad. Desconcertada por lo sucedido y tras salir con muchos problemas del centro comercial, nuestra protagonista llega a un parque de diversiones, en donde lo único que hay son juegos mecánicos en pésimo estado, «conejitos de peluches» bastante ensangrentados y caminos que únicamente conducen a Silent Hill.

Como sello característico de toda la saga, el escenario forma parte de lo más destacado ya que, en esta parte, se vuelven a incluir los edificios desagarrados y viejos, la neblina combinada con la obscuridad más espesa, efectos de sangre bien definidos e incluso la misma Heather tiene aspectos muy humanos. (Lo único malo es que es tal la oscuridad, que es necesario subirle el brillo a la TV).

La jugabilidad se conservó hasta en lo más mínimo, literalmente se basó en todo, a lo que el público respondió bastante bien al no tener que enfrascarse en un problema de reconocimiento de patrones o botones, al igual que pasó de la primera a la segunda parte.

Como era de esperar, la puzzles y acertijos volvieron a formas parte esencial de la saga (yo creo que toda); el simple hecho de tener que avanzar un nivel u obtener algo importante sugiere resolver «algo», además para los poco experimentados requiere bastante paciencia, incluso para los que ya tenemos rato en esto, también se nos puede complicar.

Algo que resalta bastante o que cambia con respecto a la segunda parte, son los combates cuerpo a cuerpo; al incluir a los ya conocidos enemigos como perros, monstruos, enfermeras sexis y demás criaturas retorcidas de nuestra mente, tendremos que valernos de golpes con tubos, cuchillos y demás cosas ahorrando la mayor cantidad posible de munición.

Como viene siendo habitual el juego tiene una durabilidad corta, pero podemos y tenemos que jugarlo varias veces, ya que al terminarlo por primera vez se descubren ciertos extras ocultos con base en las estadísticas obtenidas al final, como distintas ropas para Heather y nuevos alicientes para que el gusanillo de regresar a Silente Hill vuelva a aflorar en nuestro interior.

 

Tenemos muchas escusas para volver a jugar «Silent Hill 3», pero la más importante de todas es la cercanía Halloween y esas ganas de muchos para espantarnos al máximo al jugar de noche y en absoluta soledad.

No lo olvides, si quieres que hablemos de un juego retro sígueme en Twitter como @Fercho_R14. KEEP PLAYING!!

Fercho_R14. Gran fan de juegos como “The Legend of Zelda”, “Resident Evil”, “FIFA” y “The Last of Us”. Gusto de la mayoria de la música, en especial de Héroes del Silencio y The Rolling Stones. “The Simpsons” y “The Walking Dead” mis series predilectas. Estudiando Mercadotecnia en la Universidad Latinoamericana, qué mas se puede pedir… Águila, merengue y guapo.