LUSH llega a México

Por Andrea García Borja.

Hoy escribo para todas las personas que ponen especial atención en su cuidado personal. O sea, para todos a los que nos gusta embarrarnos de aceites esenciales, que tenemos una crema diferente para cada parte del cuerpo y que hacemos tests para saber cuál es el producto que mejor se adecua a nuestro tipo de piel o de pelo.

LUSH llega a México.

Quiero presentarles a la marca de cosméticos LUSH, la cual acaba de abrir su primera sucursal en México en el Centro Comercial Santa Fe. Aclaro para que nadie deje de leer el artículo, los cosméticos son productos para la higiene y la belleza del cuerpo, no solo maquillaje. LUSH significa suculento, exquisito, lleno de vida; así son sus productos, nutritivos, apetitosos, ricos y vitales. Los cosméticos LUSH, son buenos o benéficos en muchos sentidos, tanto para quien los utiliza como para el medio ambiente.

Más allá de los productos, lo que me motivó a escribir acerca de LUSH es la filosofía de la marca que es muy interesante, pues está basada en la responsabilidad social, enfatizando el respeto por el medio ambiente y los animales, el comercio justo y la beneficencia. Primero hablemos de su política verde, esta es diferente a las medidas ecológicas que emplean otras empresas de cosméticos. Todos sus productos son hechos con ingredientes naturales, plantean que sus productos son 100% aptos para vegetarianos y  un 80% para veganos. Además de utilizar únicamente ingredientes producidos de manera orgánica, el 46% de sus productos no tienen empaquetado, se venden «desnudos»; y el 67% de sus productos no contienen ningún conservador, estas dos características son posibles porque la mayoría de sus productos son sólidos.

Esta es la parte innovadora, LUSH busca técnicas para solidificar shampoos, acondicionadores, perfumes y otros productos cosméticos que comúnmente se venden de manera líquida. Esto les permite reducir de manera importante el uso de las botellas, de conservadores y el costo ambiental del transporte y la producción, porque los productos sólidos rinden aproximadamente 10 veces más que los líquidos. Sin embargo, en LUSH también se venden productos líquidos y otros que deben de ser empaquetados, para todos estos se utilizan botellas y bolsas 100% reciclables.

Por otro lado, los insumos con los que se producen los cosméticos LUSH, son adquiridos a través del comercio justo; esto quiere decir que son comprados a pequeños agricultores y que se paga un precio justo por éstos. El comercio justo permite que muchas personas reciban una remuneración económica que les permite llevar una vida más digna. LUSH también lleva a cabo campañas de ayuda que pretenden el mejoramiento y la protección del medio ambiente y de los animales. Estas campañas se llevan a cabo a través de la donación de la totalidad de las ganancias (excepto el IVA) del “charity pot”, un producto específico, que cambia con cada campaña.

Finalmente, LUSH también se preocupa por los derechos de los animales. Ya que en sus productos no se utiliza ningún insumo que haya sido probado en animales. No solo eso, sino que la política de LUSH plantea que no comercializará con ningún proveedor que pruebe alguno de sus materiales en animales. Es decir que LUSH solo hace negocios con empresas que compartan su filosofía de respeto a los animales.

Llendo más allá de la banalidad de los productos cosméticos, LUSH una empresa realmente comprometida con nuestro mundo. Es un gran ejemplo a seguir pues demuestra que es posible conducir un negocio que traiga beneficios para nosotros y para el medio ambiente.