Donde habitan los ángeles

Por Enrique Figueroa Anaya.

Claudia Celis
Cuento
Ediciones SM, México, 2010, 124 págs.

¿Cuándo fue la última vez que leíste un libro de principio a fin? Probablemente te vengan algunos libros a la memoria, como también, probablemente recuerdes alguno que simplemente no pudiste terminar. El leer un libro es uno de los actos más íntimos. Yo te comparto hoy uno de esos que llamo mis favoritos.

Donde habitan los ángeles.

Cuando era más chico, cuando estudiaba la preparatoria, me encontré con uno de esos libros que me atraparon de principio a fin. Fue un libro sencillo que llevaba por título Donde habitan los ángeles. La autora lleva por nombre Claudia Celis. Sí, no es un Borges o un Cortázar, es un Celis, un libro de Claudia Celis.

El libro cuenta la historia de Panchito, que un buen día es encargado con sus tíos por su mamá que promete regresar por él, para en efecto nunca hacerlo. Con una narrativa sencilla, evidentemente dirigida a un público juvenil, Donde habitan los ángeles nos evoca a nuestra propia adolescencia. Llena de dudas, alegrías, tristezas y vivencias, vamos, la vida pues.

La historia de Panchito y sus tíos nos evoca a nosotros mismos. Porque nosotros nos hemos enamorado, hemos llorado por una pérdida y hemos aprendido lecciones de manera difícil. La historia de Panchito, de alguna manera, es parte de la historia que nosotros hemos vivido. Probablemente esa la razón por la que el libro de Claudia Celis nos atrapa, nos sacude y nos emociona.

Pocos veces he soltado un libro por la imposibilidad de leerlo gracias al nudo en la garganta que me haya provocado; este libro lo hizo. Los invito entonces a que hoy, en pleno Día Internacional del Libro, se permitan conseguirlo, lo lean y lo terminen en una sola lectura. No dejen de contarme de ese instante en el que se sintieron vivos como Panchito.