«Guerrero»: dignificar la lucha por el bien común

Por Asfaltos.

En la antesala de las elecciones a diversos puestos de gobierno en nuestro país -entre ellos, desde luego, el de presidente-, se estrena un documental que suma a la reflexión previa a la emisión del voto. Estrenada como parte de la más reciente Gira de Documentales Ambulante, llega a cines ahora en su estreno comercial «Guerrero» de Ludovic Bonleux.

El documental, como su propio nombre lo destaca, nos presenta hechos sucedidos en el estado de Guerrero; sin duda, tristemente, uno de los estados de nuestro país con mayor índice de violencia. Ludovic, un realizador francés avecindado desde hace dos décadas en nuestro país, regresa al estado de Guerrero en el que ya antes había filmado.

Iniciando con uno de los eventos más dolorosos en los últimos años en nuestro país, «Guerrero» nos recuerda la desaparición forzada de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa. Es ahí, en medio de esa polvareda que descubrió muchos vicios de la justicia en México, que «Guerrero» nos cuenta sus propia historia.

Coni, Juan y Mario son los tres protagonistas de «Guerrero». Coni es una mujer que a raíz de los hechos en su estado se lanza al activismo social como parte de una de las 2 policías comunitarias locales; mientras que Juan es un profesor que desde su trinchera busca cambiar la realidad de su región; y finalmente Mario, quien perdió a su hermano como parte de la violencia guerrerense, es un experto en la búsqueda de fosas comunes en un lugar donde éstas sobran.

Con mucho cuidado y respeto por quienes captura con su lente, Ludovic nos va contando en paralelo la historia de estos tres personajes que no hacen más que dignificar la lucha de muchos que como ellos están cansados de la realidad de Guerrero. Es, a través de sus historias, que se nos muestra que además del enojo social, hay muchas ganas por buscar el bien común: por pensar en la mejoría de la comunidad, en su bienestar.

Todos con caminos diversos, pero con un objetivo en común, nos son presentados como ejemplo de lo que significa también ejercer los derechos que como ciudadanía tenemos; son sin duda ejemplos de lucha y de fuerte convicción.

En «Guerrero» Ludovic capta cada detalle con cuidado. Entre otros, por ejemplo, el desdén de las autoridades; el abandono en el que éstas tienen a mucha gente que se ha cansado de ello, por lo que se han decidido tomar acción y no simplemente esperar.

En un par de entrevistas que tuve el gusto de realizarle a Ludovic, me platicaba lo difícil que resultó la filmación de «Guerrero». Ya solo trabajar o vivir en Guerrero resulta complejo, por lo que filmar se volvió aún más difícil. En un momento de la película el realizador se encuentra a la mitad de una manifestación violenta que involucra piedras. Las imágenes, con el riesgo que significó captarlas, son valiosas para el curso de la historia.

Bajo el sello de Ambulante, «Guerrero» llega entonces en un momento perfecto, justo antes de las elecciones en México como ejemplo idóneo de lo que significa ser un ciudadano más allá del voto cada seis años. Sin quererlo, y como se lo expresé también a Ludovic, «Guerrero» plasma un retrato de los últimos 6 años en nuestro país.

 

«Guerrero» de Ludovic Bonleaux llega a un pequeño circuito de cines culturales en la capital mexicana, pero también a través de la plataforma de FilminLatino como un estreno simultáneo. Vale la pena echarle un ojo; vale la pena comentarlo y reflexionarlo tras su visionado. ¿La ven y la platicamos?

Imágenes cortesía de Ambulante.