Por Asfaltos.
No andaba de vago; quizá, solo quizá, andaba muy desaparecido, un tanto perdido… El maratón Guadalupe-Reyes comenzó con todo para su servidor, tanto que pasé de subir -no con pocas dificultades- el Tepozteco, a una boda enloquecida y de ahí a «celebrar» una vez más al «subcampeonísimo»… ¡Qué suenen las trompetillas, he vuelto, y lo hago con una canción que resulta perfecta para este lunes de auténtica cruda! ¿El responsable? El músico Rafael Mesa Zamudio: Pehuenche, para todos nosotros.
De acuerdo al «Diccionario de la lengua española» de la Real Academia Española, la palabra delirio tiene tres significados: 1) acción y efecto de delirar; 2) despropósito, disparate; 3) -en la psicología y en la psiquiatría- confusión mental caracterizada por alucinaciones, reiteración de pensamientos absurdos e incoherencia. Las tres definiciones, perfectamente -inclusive, y sobre todo la tercera-, se podrían aplicar para un enamorado empedernido.
Con un ritmo que combina la mejor tradición del bolero latinoamericano, Pehuenche nos regala con «Delirio» un tema poderoso en el que el amor se nos presenta como esa locura que a su vez tanto bien hace, pero también un poco de mal. Con una producción independiente, realizada por él mismo, «Delirio» es una tremenda carta de presentación para quienes no conocen a un músico que no cabe duda de que hace bien lo suyo.
Además de la instrumentalización, sencilla pero que atrapa de inmediato, he de confesar que disfruté mucho la letra; se nota muy bien que Pehuenche es un enamorado de la canción, por lo que jugueteando con la letra, termina por atraparnos y perdernos precisamente en ese delirio que representa de manera perfecta.
¿Les gustó la propuesta? No dejen de seguir a Pehuenche en Facebook, Instagram y Twitter. Ah, y ya saben, no dejen de compartirme sus canciones nacionales favoritas de este año.
Foto de Yussel Estrada tomada del Facebook del músico.
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