Por Fernanda Pazarán.
La inseguridad en el país es alarmante y parece que nos hemos acostumbrado a la violencia, a la muerte y a las desapariciones. Las cifras del año publicadas por la Sistema Nacional de Seguridad Pública, expusieron que hubieron 26,376 homicidios, de los cuales 18,149 fueron con un arma de fuego. Como si estuviéramos en guerra, 94 personas fueron asesinadas, traducido a 4 personas por hora. Se reportaron 760 feminicidios. Y aproximadamente 37,000 personas desaparecidas.
La representante de ONU Mujeres en México, Belén Saenz, dijo que 7 de cada 10 mujeres han sido víctimas de violencia de género. Hace unos días encontraron 49 fosas con 69 cuerpos en el pueblo de Tecomán, Colima, las cifras oficiales lo catalogan como el municipio con la tasa de homicidios más alta del país.
Nuestro país vive una crisis social, la inseguridad es el pan de cada día, así como las violaciones a los derechos humanos. Dicho lo anterior, es importante mencionar que la ONU realiza cada cuatro años y medio el Índice Universal de los Derechos Humanos, en donde se califica el progreso de los tratados internacionales en materia social y política. México ha firmado muchos acuerdos pero no le es posible ratificarlos porque no cumple con lo estipulado. La última revisión fue el pasado 7 de noviembre de 2018 y hay bastantes recomendaciones por parte de otros países. Se concluyó que hay violación de los derechos humanos a los niños, migrantes, mujeres, las minorías y los grupos indígenas, así como una alerta sobre las desapariciones y los feminicidios. Además de que el sistema judicial no es totalmente efectivo.
¿La Guardia Nacional será la mejor solución para este problema?
El presidente López Obrador publicó los ocho puntos del Plan Nacional de Paz y Seguridad, en donde habla de la prevención del delito, la capacitación a los integrantes, de que no se militarizará al país y que habrá un respeto a la libertad y los derechos humanos. En el documento también se expresa el apego al estado de derecho y la autonomía de los poderes de la Unión. Los ejes de trabajo son:
- Erradicar la corrupción y reactivar la procuración de justicia
- Garantizar empleo, educación, salud, y bienestar
- Pleno respeto y promoción de los derechos humanos
- Regeneración ética de la sociedad
- Reformular el combate a las drogas
- Emprender la construcción de la paz
- Recuperación y dignificación de las cárceles
- Seguridad pública, seguridad nacional y paz
Así suena ideal, porque el plan del presidente es atacar la fuente del delito, promover la paz y la justicia. Todo al margen de la ley y los derechos humanos. Sin embargo no todos están convencidos de que así sea en la práctica.
El pasado lunes 18, la iniciativa fue aprobada en el Senado, el coordinador parlamentario de Morena en el Senado, Ricardo Moreno, recalcó que la Guardia Nacional tendrá un mando operativo militar pero que es de carácter civil y que sólo será un proyecto con una duración de 5 años.
Se cuenta con el apoyo de los gobernadores de la oposición, sin embargo, no se tomó en cuenta las observaciones que hicieron los líderes de la oposición. Además, ni la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ni la Organización de las Naciones Unidas, están de acuerdo con el plan, porque siguen observando la vulnerabilidad de los derechos humanos de los mexicanos. AMLO mostró su desacuerdo con la sociedad civil por no apoyar la iniciativa.
En materia legal, la iniciativa modificará los artículos: 13,16, 21, 31, 32, 36, 55, 73, 76, 78, 82, 89 y 123, las cuales hablan sobre la investigación de delitos y la integración de la policía militar, naval, federal y civiles. Las leyes complementarias son: Ley de la Guardia Nacional, Uso Legítimo de la Fuerza y el Registro de Detenciones.
Nuestros representantes han votado, a los ciudadanos sólo nos queda esperar que deje de existir inseguridad pero que no se violen los derechos humanos. El Índice Universal de los Derechos Humanos de 2022 debe mostrar el cambio verdadero. La recomendación para el presidente sería que trate de hacer el proceso lo más transparente posible, con supervisión de agentes de la sociedad civil y organismos internacionales, para que los mexicanos estemos seguros de que vivimos en una democracia legítima y que busca lo mejor para la sociedad, no solo para un partido político o las elites.
Fernanda Pazarán / #ConcienciaRCMX. Soy estudiante de Relaciones Internacionales. Soy ambientalista, con una ideología liberal y de izquierda. Estoy convencida de que el mundo puede mejorar y que el cambio lo hacemos cada uno de nosotros. Me gusta escribir de todo tipo de temas, pero tengo una preferencia mayor por los temas políticos tanto nacionales como globales. Siempre hay un elefante en la habitación del que se tiene que hablar. He participado en diferentes eventos diplomáticos y políticos.
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