Cómo viajar con 100 dólares en Las Vegas, parte 2

Por Meraz (de Los Weeds).

Parte 1.

El viaje fue tomando más intensidad el día de la boda… Después de tomar un agradable coctel en la suite 1101 del hotel Planet Hollywood, nos dirigimos al club de ese lugar, cuando de la nada llegó un árabe con varios fajos de billetes y nos invitó al VIP. Pidió varias botellas y nos dejó meseras y escoltas que nos acompañaban hasta el baño. El tipo estaba totalmente ebrio, nos dijo que regresaba en un momento, que iba a volver apostar y le dejó 100 dólares a uno de los invitados de la boda. Todo era totalmente absurdo, alguien que se gasta semejante cantidad de dinero en un grupo de desconocidos, es surreal. Me sentí desconfiado pero cuando la novia dijo -qué importa “it´s Las Vegas”- me dejé llevar por el momento. Disfrutamos un par de horas, hasta que nos hartamos; el árabe regresó, le dimos las gracias y nos fuimos del lugar.

Cómo viajar con 100 dólares en Las Vegas, parte 2.

Al día siguiente la fiesta seguía, esa ciudad nunca duerme, siempre hay movimiento y los amaneceres llegan más rápido. Ya caída la noche, nos fuimos a conocer un poco de Las Vegas viejo. Me pareció muy enigmático el hecho de ver casinos y moteles  viejos e imaginar cuánta gente ha estado en esa ciudad.

De vuelta al cuarto de hotel, tomamos un botella de champaña que le habían regalado a las novios, y nos dirigimos a divagar por las calles haciendo todo tipo de locuras. Llegamos al hotel New York New York, donde estaba presentándose el doble de Michael Jackson, lo cual fue verdaderamente impresionante; en realidad una magnífica imitación del difunto.

Me quedé con ganas de ver más shows, pero ya será para la próxima, aunque en esa ciudad con ver a la gente en la calle tienes un excelente show; dicen que es el Disneylandia para adultos, y lo confirmé  al encontrarme por las calles a botargas de Mickey y Minnie Mouse, así como el Pato Donald, tirados en la calle ebrios pidiendo una moneda. Sin duda alguna la creatividad no falta para los que quieren seguir la fiesta.

Las Vegas es una ciudad totalmente capitalista, de mucho derroche de dinero, pero gracias a que iba como invitado, no gasté más de lo que tenía; las apuestas son una fuerte tentación ya que las máquinas te hacen ganar un par de veces y después te dejan sin nada. Debes saber cuándo parar.

El choque cultural entre Estados Unidos y México es fuerte, tal vez sea por reglas tan estrictas que no se pueden romper en Norteamérica, logrando mayor estabilidad y orden.

Este viaje me inspiró mucho, y sin duda me encantaría regresar a conocer más y seguir la fiesta eterna que se vive ahí, por lo que como diría el gran Elvis Presley: ¡Viva Las Vegas!